Un pajarito volaba hacia el Sur durante el invierno. Hacía mucho frío, tanto que el pajarito se congeló y cayó al suelo. Estaba agonizando, al borde de la muerte, pero... mientras yacía en el suelo, una vaca se acercó…y le cagó encima.
“Arropado” por el excremento de vaca, el pajarito comenzó a sentirse calientito, como diría el Pity. De hecho, la mierda lo estaba haciendo revivir. Sintiéndose cómodo y feliz, pronto se puso a cantar (dicen los que estaban, canciones de Cacho Castaña).
Un gato que por allí pasaba (no era Cacho), lo oyó y se acercó a investigar. Siguiendo la música, el gato descubrió al pajarito debajo de la mierda, lo sacó de allí y…¡Se lo comió!
Moralejas:
1 - No siempre el que se caga en vos es tu enemigo.
2 - No siempre el que te saca de la mierda es tu amigo.
3 - Y, sobre todo, cuando estés tapado en mierda, mantené la boca cerrada.
¿Qué importa si los gatos comemos bichos con olor a mierda?
No hay comentarios:
Publicar un comentario